domingo, marzo 26, 2006

Sé que no soy mansa, ni tierna; o que quizàs, a veces puedo ser tierna, pero no lo soy siempre. Mansa no, seguro. Cruel? muchas veces.
Mansa ternura no es mi descripción personal.
¿Porqué entonces elegí este nombre para este blog? probablemente, porque adoraría creer que existe la mansa ternura, algo tan inexistente e inhumano como el nirvana, o la perfección absoluta, o los ángeles, o la justicia o el merecido reconocimiento a quien se lo merezca. Adoraría creer, más no lo creo. No creo tampoco en dioses, lo cual empeora la situación. Una mediocre y poco practicante creencia -tan siquiera eso- me permitiría suponer que un ser superior podría poseer una mansa ternura.